viernes, 12 de abril de 2013

La estupidez humana

Cada vez somos más estúpidos; y no hablo en un sentido individual si no en sentido general, los hay más, los hay menos y, unos pocos (pero pocos), tienen dos deditos de frente (pero ya digo, que son los menos).
A lo largo de nuestra vida realizamos estupideces; de la mayoría nos damos cuenta y desearíamos cambiarlas, o no (eso de que de los errores se aprende), pero el caso es que las hacemos, pero no necesitamos ningún manual para ello, o eso creía yo.


¿A qué viene esto? Bueno, no le estoy llamando estúpido a nadie, jejeje, es una pequeña introducción para hablar de un pequeño artículo que leí en la revista "Mujer hoy" (otra vez), en el que hablaba de una película llamada LOL (año 2008), escrita y dirigida por Lisa Azuelos para su hija que, por aquellos años, cumplía los 16, porque "nadie presta atención a esta generación, nadie describe sus vidas" y, así, darles un filme generacional con el que poder sentirse identificados...
Yo no recuerdo haber necesitado una película para sentirme identificada, y menos mi madre o mi abuela; ¿de verdad hemos llegado a tal extremo que necesitamos una película para sentirnos identificados? personalmente, yo no necesito ninguna película para saber quién soy, y menos para que me diga cómo tengo que ser; las películas pueden utilizarse para enseñar valores, pero no para decidir cómo debe ser cada persona.
Por si fuera poco, de esta película sale ahora la versión americana, protagonizada por la "niña prodigio" Miley Cyrus y Demi Moore en la que cuentan la historia de adolescentes que lidian con las muchas complejidades, peligros y dilemas de la juventud contemporánea en busca de su independencia, identidad y madurez... A ver, vale que es una edad complicada y todo lo que se quiera, pero de ahí, a necesitar una película para encontrarse a si mismos... Pues yo lo veo un poco excesivo.
Por eso digo, que cada vez somos más estúpidos en general, y de paso, menos imaginativos, porque dentro de nada ya vamos a necesitar todas las generaciones una película que nos indique las estupideces que debemos cometer a lo largo de toooooda nuestra vida.

lunes, 8 de abril de 2013

¿Cuestión de sexos?

Ya he escrito en alguna otra ocasión sobre la igualdad de sexos; es increíble cómo se pueden llegar a sacar las cosas de quicio.
El sábado, tomando un café en un bar, cogí, como es mi costumbre, una revista, Mujer Hoy concretamente; me gusta leer los textos de opinión del grupo de escritoras que tienen que escriben en la primera página; con algunos estoy de acuerdo, otros me entretienen y con otros, no comulgo demasiado, como es el caso del que leí el otro día.
El texto venía hablando de que por fin se había conseguido la igualdad en el Parlamento, que ya hay un 40% de mujeres y que vamos camino de la igualdad en sentido estricto.
Yo no estoy muy de acuerdo; ¿porqué tiene que haber el mismo número de hombres y de mujeres en una empresa? ¿Si un hombre está más preparado que una mujer, porqué se va a coger a la mujer simplemente por una estadística (o viceversa)?
Quieren la igualdad, pero no se dan cuenta de que es una igualdad forzada; queremos ser iguales pero al mismo tiempo ser diferentes; yo eso de tener que contratar a una plantilla 50-50 no lo veo muy normal, habrá que coger a aquella persona más cualificada; si no estás preparada para un puesto de trabajo, por qué te lo van a dar por el simple hecho de ser mujer? a mi eso me parece un feminismo radical que es tan malo como el machismo; ya está demostrado que los extremos no son buenos, por qué seguimos emperrados en querer demostrar lo contrario?
Este texto no implica que yo no esté a favor de la integración de la mujer en el mundo laboral, ni mucho menos, pero creo que hay que tener dos dedos de frente y, si queremos igualdad, como he dicho en otras ocasiones, tendremos que ser coherentes... Digo yo, ¿o no?


jueves, 4 de abril de 2013

Las Falsas Amistades

A veces creo que tengo un imán para atraer a los falsos... O eso o me acabará quedando la opción de pensar que soy yo la equivocada, que también puede ser, pero, sin embargo, después por terceras personas me entero de que hay otras personas con las que no tengo tanta amistad, de que me ponen por las nubes, o al menos, que hablan bien de mi...
Qué curioso verdad? las personas con las que se supone que tienes confianza son las que más tardan, pero que acaban fallando, y después otras, con las que no tenías intención de profundizar en una amistad, acaban siendo buenos amigos o compañeros con los que sabes que puedes contar.
A dos meses de terminar la carrera, me acabo de dar cuenta, de que las amigas con las que empecé, no eran tan amigas (bueno, alguna se salva, no todas) y, sin embargo, personas que nunca pensé que llegaría a conocer, me han sorprendido para bien, algunas incluso más que bien. 
Nunca fui una persona de muchos amigos, pero los pocos que tengo, intento conservarlos, aunque lo cierto es que me lo ponen muy difícil o, lo más probable, y es la conclusión a la que he llegado, es que nunca fueron amigos; fueron una especie de simbiosis en la que tú me ayudas y yo te ayudo y, ocasionalmente, salimos de fiesta juntos, pero en cuanto pueda, te daré la estocada. 
Con esta entrada no pretendo llegar a ninguna parte, ni a una conclusión, es tan sólo una reflexión de cómo hay gente que es capaz de conservar a sus amigos de la infancia y otros, en cambio, vamos dando tumbos de un lado para otro...


Y ahora, termino la entrada con una frase que escuché en un capítulo de la serie "Aída" que me encantó (asombroso pero cierto):
"La soledad es un infierno para los que no saben apreciarla, y un paraíso para los que la disfrutan."
Tengo la gran suerte (o la desgracia), de pertenecer al segundo grupo, así que seguiré esperando a mi amig@ del alma pacientemente jejeje ;P.

lunes, 1 de abril de 2013

Edificio de Mandriles

Hace unas semanas, Cristina R.H. publicó una entrada en su blog titulada "País de Quijotes"; si pincháis sobre el nombre podréis leerla, muy entretenida y con gran dosis de realismo.
Me he tomado la libertad de semiplagiarle el título (espero que no te importe) con mis connotaciones personales, y es que hoy, no tenía previsto escribir una entrada, pero, cuando bajé a mi perro, me encontré con el portal del edificio de esta guisa:


Y es que, como dice Cristina en su entrada, vivimos en un País de Quijotes y, muchos de nosotros, vivimos en edificios con mandriles, con perdón a los mandriles porque triplican en civismo a estos individuos.
Decimos que pertenecemos a un país civilizado... Me gustaría a mi saber qué se entiende por civilizado, cuando ni siquiera en su propio edificio son capaces de mantener el portal limpio; su mentalidad será ¡Que lo limpie la señora de la limpieza! Vamos a ver, señoritingos y señoritingas de las ... , la señora de la limpieza está para barrer y fregar el suelo, limpiar los espejos y poco más, no para limpiar la mierda que vosotros dejáis por ahí tirada, que es una trabajadora, no una esclava, eso ya para empezar; y para seguir, esa señora a la que pretendéis explotar viene un día a la semana que, casualmente, es el lunes; pretendíais dejar así el rellano principal hasta el lunes que viene? Pues en mi opinión, y pido perdón de antemano: sois unos putos cerdos (o cerdas, no voy a hacer discriminación de sexos), le parezca mal a quien le parezca mal, que la gente está muy sensible últimamente, pero también bien cierto es que quien se pica, ajos come.
Me gustaría a mi saber cómo tienen estos seres taaan civilizados sus casas; seguro que son de esos neuróticos/as que caminan con las mopas en los pies para no rallar el parqué o unos maníacos de la limpieza que si ven una minimota en el suelo ya les da un "pallá", por no decir que probablemente sean de esos anti-animales en el piso porque lo llenan todo de pelos... Pero después, en lo que a zonas comunes se refiere, libre albedrío para todo el mundo! que como tenemos señora de la limpieza y a mi me da igual todo aquello que sea de puertas de mi casa para fuera, ya pueden estar los rellanos de porquería hasta el techo que a mi me da igual, es más, contribuyo a esa "buena obra social" de darle un trabajo extra a la señora de la limpieza por el cual, no va a cobrar.
De verdad, que más de uno/una no se de dónde salió; iba a decir de la selva, pero los nativos que viven en las selvas les dan mil vueltas en civismo y respeto a todos y todas estos/as energúmenos/as que andan sueltos por "la ciudad" adelante.
He de decir, que los papeles no siguen ahí, porque en un ataque de ira y repulsión (aunque no me diera el ataque lo iba a hacer igual, sólo que menos enfurecida), después de subir al perro, bajé con una bolsa, recogí todos los papeles que estos mandriles dejaron en el suelo, y los tiré (al cartón que hay que reciclar).
También tengo que decir, que a escasos 5 metros de mi edificio hay una papelera; por si alguien intenta achacar esta dejadez, o, sencillamente, mala educación, a la comodidad y a la pereza.